La gestión de fondos de formación de La Tripartita.
Estamos muy contentos del nuevo sistema de Bonificaciones de la Fundación Tripartita que simplificó la gestión (relativamente, este tema da para otro post…) y agilizó el cobro de las bonificaciones en comparación con los anteriores Planes Forcem.
Pero… en aquellos tiempos, los consultores elaborábamos laboriosas memorias para que las empresas presentaran sus solicitudes, sí , eran trámites interminables pero por lo menos pasábamos por una serie de pasos a los que nos obligaban que sin duda ayudaban muchísimo en que la formación recibida finalmente fuera más rentable y ajustada a las necesidades. Estábamos obligados a presentar una detección de necesidades formativas, una memoria sectorial y una memoria de empresa, objetivos a largo, medio y corto plazo del plan de formación y de cada una de las acciones formativas que se solicitaban. No quiero decir que haya que volver a todo aquello pero si que, en muchos casos, las empresas se saltan ese proceso y acaban haciendo la formación que les van ofreciendo los comerciales de formación o un plan de formación sin pies ni cabeza y con poca estructura o objetivos más allá del propio ejercicio.
Ni de más está decir, que no es el momento ideal para los Responsables de formación de hacer Evaluaciones de impacto de la formación realizada en sus empresas, y correr el riesgo de poner su gestión en evidencia en el caso de que los resultados no sean los óptimos. Ya ruedan demasiadas cabezas. Justificar que se financia parte del Plan de Formación de la empresa ya es el objetivo número uno y podemos darnos por contentos!
Creo que antes de que se otorguen las subvenciones para formación, la Fundación Tripartita debería cerciorarse de que el dinero que se va a derivar a las empresas se invierte de una manera eficaz. Solo las grandes y medianas empresas que ya disponen de la figura de un departamento de formación respsonsable son las que, en la mayoría de los casos, aprovechan y rentabilizan su formación ya que se ha estudiado cuidadosamente el plan de formación de la empresa, han detectado sus necesidades, trazado estrategias y objetivos. También podemos salvar a los empresarios intuitivos! pero muchos, muchos, siguen una organización que se diría… a salto de mata.
Desgraciadamente la mayoría del tejido empresarial no pasa ni por estos procesos, ni siquiera le ven su importancia. Es por eso que insto a la Fundación Tripartita a que estudie la manera de garantizar esas inversiones. La manera no sé, quizá como que para implantar un Plan de Igualdad en la empresa hay que formar a un técnico en la materia, podría ser que para beneficiarse del las ayudas a Formación Continua haya que formar primero en algunos mínimos a un técnico que tenga las nociones básicas de la planificación de la formación en la empresa. Una vez más empezamos la casa por el tejado.